¡Vamos a la bocatoma!

Terminamos de almorzar y se nos ocurre caminar por una trocha, que corre al lado de una de las edificaciones que constituyen el complejo arqueológico Huacas del Sol y La Luna, en el distrito de Moche, en Trujillo.

El Sr. Díaz y su nieta.

Apenas empezamos nos encontramos con el Sr. Díaz quien nos invitó a conocer la bocatoma del río Moche, que quedaba cerca de allí. Nos animamos y comenzamos nuestro paseo. Tenía algo de temor por lo solitario del lugar, sin embargo se esfumó cuando nos percatamos que la casa del Sr. Díaz, estaba cerca de allí. Lo acompañaban un ejército  de perritos quienes lo cuidaban a él, a su familia y a su casa.

La caminata fue espectacular. Por un lado teníamos uno de los tantos canales que se bifurcan desde el río Moche, árboles de huabas, la increíble estructura de una pirámide moche (Huaca del Sol) y del otro lado, una chacra de caña de azúcar, con todas sus plantas en flor. Llegamos, la vista es sencillamente hermosa. Un amplio valle se abre a nuestra vista, las garzas nos dan la bienvenida. Al lado derecho de la bocatoma, se alza majestuoso un roquedal de caídas suaves. A mitad de la subida, un mirador: el valle Moche. Un poco arriba, cerca de la cima, el corazón se acelera. 

¿Sería esta la imagen que veían los antiguos moches al llegar a la cima? A pesar del tiempo transcurrido y de su obvio desgaste, la pirámide que se alza imponente y el paisaje que la rodea hacen que el respeto y la admiración por los antiguos moches se acreciente muchísimo más.

La tarde es el momento mágico para disfrutar de este hermoso paraíso.

Vista panorámica del valle a la derecha del río Moche.

Vista panorámica del valle a la izquierda del río Moche. Se aprecia la Huaca del Sol y el pueblo de Moche.

Perritos, vigilando...

La bocatoma.

Justo en el centro.

El centro de control de la Bocatoma Junta de usuarios Río Chancay.

Subiendo...

¿Cómo llegamos? Partimos desde Trujillo por la carretera que lleva a la campiña de Moche. Frente al Restaurante El Huabal se abre, a la izquierda, una trocha breve y de allí no hay más de 15 minutos para llegar a la bocatoma, caminando.

Ruta desde el centro de Trujillo.

Todas las fotos de @andantemochero